Suplementos alimenticios para niños

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Cuando se trata de niños, queremos darles lo mejor de lo que disponemos para mantenerlos sanos. Los niños están en constante crecimiento y tienen necesidades nutricionales diferentes a las de los adultos. Por eso, en Humasana, ofrecemos una selección de complementos alimenticios naturales para niños, adaptados para ellos con ingredientes de origen natural y sin ingredientes controvertidos para aportarles todos los nutrientes esenciales para su desarrollo.

• Los ácidos grasos Omega-3, presentes en los aceites de pescados azules como el salmón, son importantes para el desarrollo del cerebro y del sistema nervioso de los niños.

• Los probióticos son bacterias beneficiosas que favorecen la salud intestinal. Pueden ayudar a reforzar el sistema inmunitario y a mantener un equilibrio digestivo saludable.

• La vitamina D es importante para la salud ósea e inmunitaria. Un aporte de vitamina D en invierno es útil para reforzar la inmunidad y prevenir infecciones.

• La vitamina C es esencial para reforzar el sistema inmunitario y aportar energía al organismo.

• El hierro es importante para transportar oxígeno por el cuerpo y prevenir la anemia. Algunos niños, sobre todo los más pequeños y los adolescentes en periodos de rápido crecimiento, pueden tener carencias de hierro.

Algunos superalimentos son buenos para la salud de los niños. Multivitamínicos y naturalmente ricos en varios minerales, son cócteles nutricionales.

• El aceite de hígado de bacalao es rico en vitamina A y omega-3.

• La espirulina es un alga rica en proteínas, hierro, vitaminas del grupo B y antioxidantes.

• La jalea real es un producto de la colmena, junto con el propóleo y la miel, rico en nutrientes, sobre todo vitaminas, minerales y ácidos grasos.

• La miel es una fuente natural de nutrientes y tiene propiedades antimicrobianas. Puede ayudar a aliviar la tos y el dolor de garganta de los niños.

Como norma general, es importante tener en cuenta que los complementos alimenticios para niños no deben sustituir a una dieta sana y equilibrada ni a la actividad física. Los niños son personas sensibles, por lo que también es importante tener cuidado de utilizar productos adecuados y respetar la dosis correcta.