Sin crueldad: la empresa no prueba sus productos en animales.
La fundadora de Tigovit, Tanja Hohenester, ha viajado por todo el mundo durante muchos años, acumulando una gran cantidad de impresiones y conocimientos. Así nació su pasión por el té verde. ¿Su idea? Ofrecer un extracto de té verde en forma de cápsulas, procedente de cultivos ecológicos controlados. La fundadora visita regularmente la plantación de té verde de China, de donde procede el extracto, para comprobar las condiciones in situ. La empresa está formada por un equipo de mujeres comprometidas.